Si estás leyendo este artículo es porque seguramente sueñas con ser madre algún día, posiblemente en un horizonte muy cercano, por lo que debes tener presente que el paso del tiempo es un factor fundamental a la hora de escoger tus prioridades vitales y clave en la toma de decisiones que son de gran trascendencia personal, porque la edad afecta de forma inexorable a tu fertilidad.
Por eso seguro que será de gran interés que te hagas una idea general de cómo la edad afecta a tu sistema reproductivo y a la fertilidad, y saber si el impacto del paso de los años en tu deseo de maternidad se puede evitar, reducir o revertir, tanto mediante la medicina reproductiva como con medios naturales.
“¿Amas la vida? Pues si amas la vida no malgastes el tiempo, porque el tiempo es el bien del que está hecha la vida” (Benjamin Franklin).
¿Cómo y por qué la edad afecta a la fertilidad?
En primer lugar, no pierdas de vista que la fertilidad es una función orgánica que es imprescindible para la supervivencia del ser humano en su conjunto, es decir, como especie, pero no del individuo. Es por eso, que podemos vivir muchos años después de dejar de ser fértiles.
En segundo lugar, la edad afecta a todo el organismo, no solo a la fertilidad, pero la reproducción es una función muy compleja que requiere de unas condiciones específicas para manifestarse y que es fácilmente perturbada por diferentes factores como el estrés, la contaminación ambiental, la práctica de excesivo ejercicio, o la falta de sueño, entre otros.
La fertilidad requiere de la madurez sexual que se alcanza a partir de la pubertad. En las mujeres la edad reproductiva se extiende teóricamente desde que comienza a tener ciclos menstruales hasta la menopausia, que se presenta de media alrededor de los 50 a 52 años, ahora bien, la fecundidad no es ni mucho menos igual a lo largo de todos esos años, ya está significativamente comprometida a los 35 años y casi agotada en torno a los 45 a 47 años con el inicio de las primeras irregularidades menstruales de la perimenopausia (“peri” significa alrededor, o sea, conforme se aproxima la menopausia).
¿Me puede pasar a mi? Estadísticas y probabilidades.
De nuevo recuerda que, puesto que una estadística refleja una media matemática, date cuenta de que tampoco estas cifras se van a cumplir en todas las mujeres, es decir, que por mucho que estadísticamente parezca que la probabilidad de quedarte embarazada por ciclo menstrual a los 40 años sea del 10%, no significa en absoluto que se cumpla en todas y cada una de las mujeres. Si pretendes que a los 40 años bastará con que esperes y lo intentes tranquilamente durante 10 meses consecutivos y en consecuencia conseguirás sumar un 100% de posibilidades de éxito, podrías llevarte un desagradable chasco por varios motivos, por ejemplo, porque para la edad de 40 años en una parte considerable de esas mujeres ya se habrá establecido una menopausia precoz, y no sabes si por desgracia ese podría ser precisamente tu caso, de hecho una parte considerable de mujeres en la treintena ya padecen de menopausia muy precoz.
A partir de los 30 la fertilidad desciende de forma acusada
El número de ovocitos que contienen los ovarios, es decir, la reserva folicular, disminuye gradualmente, tal disminución se hace más patente en torno a los 30-32 años y disminuye más rápido a partir de 35-37 años.
Asociada a la disminución del número de ovocitos hay una paulatina degradación de su calidad. La disminución de la calidad y cantidad de óvulos se la denomina baja reserva ovárica.
En los espermatozoides, aunque la edad no necesariamente comprometa su cantidad, sí que supone una paulatina degradación de su calidad, y estudios recientes señalan el inicio del declive en torno a los 25 a 27 años.
La degradación de la calidad de ovocitos y espermatozoides es motivada por la acumulación del efecto del estrés oxidativo. La producción de energía que todas las células necesitan para vivir implica fenómenos de oxidación con liberación de radicales libres que lesionan o fragmentan el ADN, que es la información genética hereditaria, trasmitida de padres a hijos, y contenida en los cromosomas de las células con potencial reproductivo. Los daños en el ADN producen fallos en la fecundación y anomalías en los embriones, que pueden originar problemas como la ausencia de implantación de un embarazo, un aborto espontáneo involuntario, problemas gestacionales, o bebés con enfermedades genéticas, la más común es la trisomía o síndrome de Down.
Con la edad también disminuye la actividad sexual, pero se sabe que independientemente de la frecuencia en las relaciones sexuales, la edad en sí disminuye la fertilidad.
Conforme se suman años aumenta la incidencia y riesgo de padecer otros trastornos de la salud que afectan negativamente a la fertilidad, como miomas o endometriosis.
A más edad hay mayor riesgo de complicaciones de salud motivada por un embarazo tardío, como la hipertensión arterial, la diabetes gestacional, las anomalías de la placenta, las alteraciones de la tiroides o el parto prematuro. Se considera un embarazo tardío aquel se produce a partir de 35 años. (1)
Bueno, bueno, no exageremos ¿pero la tecnología médica todo lo puede, verdad?
No te engañes, las técnicas de reproducción asistida pese a que facilitan la concepción, no son omnipotentes, y no pueden garantizar que tengas un bebé.
Todo y que, muchas parejas que son conocedoras del efecto de la edad sobre su fertilidad acceden rápidamente a la reproducción asistida para incrementar sus posibilidades de engendrar un hijo, a menudo desconocen que las tecnologías de reproducción asistida no pueden compensar el declive de la fertilidad debido a la edad, tanto de las mujeres como de los hombres. (2)
Por ejemplo, las tasas de nacimiento en un primer ciclo de fecundación in vitro para una mujer de 35 años se encuentran en torno a un 30%; pero en torno a los 40 años desciende al 10%. Se están haciendo constantes avances para mejorar estas tasas; pero estos avances se aplican de forma muy desigual según los países o la competencia de los equipos médicos encargados de aplicar estos progresos. Por ejemplo, los protocolos de fecundación in vitro natural son más adecuados que los estimulados para abordar la baja reserva ovárica relacionada con la edad, pero esta alternativa no es la más conocida ni extendida.
Las mujeres que reciben óvulos obtenidos de donantes jóvenes y sanas, en ausencia de otros trastornos de la fertilidad, tienen unas elevadas tasas de éxito, pueden llevar adelante una gestación incluso en casos de menopausia precoz, o años después de que ya sus óvulos no fuesen fértiles. Dependiendo de la legislación de los países se suele limitar a 50 años, aunque se han reportado casos en la India de mujeres que han logrado nacimientos vivos con bebés sanos hasta con 70 años.
Aunque un embarazo tardío controlado médicamente durante la gestación y en el parto es más seguro que uno sin control, desgraciadamente la reproducción asistida no tan solo no puede garantizar un hijo, sino que no elimina los riesgos de salud del embarazo tardío, como la hipertensión arterial, la diabetes gestacional, las anomalías de la placenta, las alteraciones de la tiroides o el parto prematuro (Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos, 2017).
La reproducción asistida tampoco asegura que el bebé nacerá sano o sin complicaciones de salud, pese a que dispone de métodos de cribado genético que seleccionan los embriones viables sin anomalías cromosómicas.
Es interesante señalar que una gran parte de mujeres y hombres, preguntados respecto a las probabilidades de embarazarse una mujer gracias a la reproducción asistida afirmará que están en torno al 100%. ¿Te parece sorprendente? No, es marketing y refleja, por un lado, lo efectiva que es la publicidad y, por otro lado, la profunda capacidad de sugestión colectiva y autoengaño que puede llegar a cegar a toda una sociedad.
Hoy por hoy ninguna tecnología puede romper la barrera que la naturaleza y la biología imponen y la juventud es un factor de máxima relevancia en lo relativo a la capacidad reproductiva.
La preservación de óvulos de mujeres jóvenes que desean aplazar su maternidad y prevenir los efectos de la edad, puede ser efectiva, pero no es una solución completamente satisfactoria, en primer lugar, porque es una opción que no está al alcance de todas las mujeres, y en segundo lugar porque más bien apunta a que habitamos en una sociedad con un presente y un futuro altamente distópico, que obliga a adoptar este recurso in extremis.
Lo mismo ocurre con los experimentos con células madre, trasplante de núcleo, trasplante de ovarios, etc. Si bien suponen un gran avance para parejas que de otro modo no podrían ser padres de ningún otro modo, no dejan de ser una forma muy incauta de depositar excesivas esperanzas e ilusiones en procedimientos que eclipsan la percepción de que para la tarea de la engendrar un hijo sus ciclos vitales naturales dictan unos plazos temporales ineludibles, más breves y precoces.
La reproducción asistida desplaza la atención que las políticas educativas, sociales, laborales y sanitarias estatales deberían prestar sobre la incongruencia que supone orientar y alentar a las jóvenes hacia el aplazamiento de la maternidad con métodos anticonceptivos en las dos décadas que son más fértiles, para a continuación quizás verse obligadas a recurrir a las técnicas de reproducción asistida, con el riesgo de que si dejan todo en manos de la tecnología médica, tal vez en última instancia malograrán sus posibilidades de ser padres.
¿Existe algún test que mida mi reserva de óvulos?
Sí, el diagnóstico de la reserva ovárica se realiza combinando la ecografía transvaginal para el recuento folicular y el perfil hormonal del día 3 en sangre.
La reserva ovárica no tiene por qué ser idéntica en mujeres de la misma edad, de la misma manera que, por ejemplo, observamos que no todas las mujeres comienzan a menstruar a la misma edad.
Aproximadamente el 10% de las mujeres sufren un descenso de la función ovárica antes de lo normal.
Por eso sería prudente hacer un análisis de reserva ovárica de forma rutinaria en mujeres en torno a los 28 años, independientemente de si en el momento presente desean quedarse embarazadas.
¿Los efectos de la edad sobre la fertilidad son reversibles?
La reproducción asistida puede facilitar algunas de las tareas que la naturaleza hace por sí misma:
- Estimular la ovulación mediante el uso de hormonas.
- Seleccionar espermatozoides sanos para inyectarlos en el útero.
- Extraer óvulos del ovario materno con la esperanza de que algunos sean de buena calidad, fecundarlos con espermatozoides bajo el microscopio, esperar a que se forme un embrión y escoger un embrión sano para implantarlo de vuelta en el útero de la madre.
Sin embargo, la medicina convencional hasta el momento considera que no existe ningún tratamiento para mejorar la calidad ovocitaria.
Revisa tu lifestyle para recuperar tu fertilidad
Pese a que el dictamen de la medicina reproductiva convencional sea que la baja reserva y calidad ovárica es irreversible y que no hay ningún método demostrado para mejorarla una vez se ha confirmado, lo cierto es que si la situación aún no alcanza un nivel extremo en muchos casos persiste suficiente potencial de recuperación como para lograr una gestación y el nacimiento de un bebé sano.
Rescatar este pequeño margen de oportunidad no será regalado, requiere hacer un exhaustivo repaso de los hábitos y lifestyle. El potencial de regeneración puede ser alentado mediante un tratamiento natural “rejuvenecedor” muy profundo e intenso que incluya una larga lista de acciones, desde la revisión de los patrones de descanso, del ejercicio, de la vida interior, de la alimentación, hasta el empleo de complementos nutricionales dirigidos, por ejemplo, a la reducción de la oxidación celular, para mejorar la actividad mitocondrial, que favorezcan la eliminación de toxinas o que modulen y equilibren el balance hormonal.
Por ejemplo, un efecto muy evidente que tiene la edad sobre la actividad de los ovarios, es la irregularidad de los ciclos. Existen fórmulas a base de plantas procedentes de la medicina tradicional china que mejoran la calidad de los óvulos (3) (4), también disponemos de otros nutrientes como, por ejemplo, la vitamina C y la vitamina B6 (5) que mejoran la producción de progesterona, necesaria para que pueda producirse la gestación.
En otro artículo “¿SOY DEMASIADO VIEJA (O JOVEN) PARA SER MADRE?” te he explicado hasta qué punto una gran cantidad de mujeres desconocen que la edad es un factor de riesgo que disminuye su fecundidad, los motivos que influyen en tal desconocimiento y las consecuencias que se derivan de tal ignorancia.
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ESTUDIOS CIENTÍFICOS REFERENCIADOS EN ESTE ARTÍCULO
1. Maternidad tardía
Delayed child-bearing
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22260768
2. El declive de la fertilidad femenina por la edad
Female Age-Related Fertility Decline
https://www.acog.org/Clinical-Guidance-and-Publications/Committee-Opinions/Committee-on-Gynecologic-Practice/Female-Age-Related-Fertility-Decline?IsMobileSet=false
3. Establecimiento de una lista de hierbas medicinales antienvejecimiento utilizadas en la medicina coreana por la minería de texto de la literatura médica clásica coreana, “Dongeuiham, ” y la evaluación preliminar de los efectos antienvejecimiento de estas hierbas.
Establishment of a Comprehensive List of Candidate Antiaging Medicinal Herb Used in Korean Medicine by Text Mining of the Classical Korean Medical Literature, “Dongeuibogam,” and Preliminary Evaluation of the Antiaging Effects of These Herbs
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4377522/
4. Gestación exitosa después de un tratamiento de medicina herbal china en una mujer de 43 años con baja reserva ovárica y fibrosis múltiple uterina: Reporte de un caso.
Successful Pregnancy after Treatment with Chinese Herbal Medicine in a 43-Year-Old Woman with Diminished Ovarian Reserve and Multiple Uterus Fibrosis: A Case Report
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5597078/
5. La vitamina B6 modula la activación transcripcional por múltiples miembros de la superfamilia del receptor de la hormona esteroide
Vitamin B6 modulates transcriptional activation by multiple members of the steroid hormone receptor superfamily
https://www.researchgate.net/publication/284002023_Evolutionary_Science_of_Female_Orgasm